Un proyecto de ley presentado por legisladores de La Libertad Avanza y el PRO busca introducir modificaciones sustanciales a la actual Ley de Identidad de Género (Ley 26.743), generando una fuerte preocupación en la comunidad LGBTIQ+ y entre referentes de derechos humanos. Este proyecto, calificado como «hecho a la medida de este gobierno superconservador» por la diputada Mónica Macha (presidenta de la Comisión de Mujeres y Diversidad), propone cambios que, según sus críticos, representan un claro retroceso en la política de derechos.

Entre las modificaciones más alarmantes se encuentra la prohibición para menores de 18 años de someterse a cirugías de reasignación de sexo. Además, el proyecto establece que las modificaciones registrales de sexo, nombre de pila e imagen para menores de edad solo podrán realizarse con el consentimiento «expreso y unánime de ambos progenitores o representantes legales«, y requerirán la validación de un «equipo interdisciplinario compuesto por un médico clínico, un psiquiatra y un psicólogo independientes». Esta medida ha sido fuertemente cuestionada por Alba Rueda, vocera de Mujeres Trans Argentina, quien sostiene que la iniciativa «intenta llevar al plano de las evaluaciones psicológicas y psiquiátricas la identidad de género» y «desconoce todo el marco normativo vigente».
La propuesta colisiona directamente con los principios de autonomía progresiva de niños, niñas y adolescentes, y con las convenciones internacionales a las que Argentina adhiere. La diputada Macha remarcó que en Argentina «los 16 años son una bisagra» en la que los adolescentes ya pueden votar y ejercen derechos de manera progresiva. Impedirles a partir de este proyecto que decidan sobre su identidad registral y que esta decisión quede supeditada al consentimiento unánime de los padres, vulnera la autonomía que las adolescencias van construyendo en su camino hacia la adultez.
Ley de Identidad de Género
¿Un Paso Atrás?
Un análisis visual sobre el proyecto de ley de PRO y La Libertad Avanza que busca modificar la Ley 26.743, una legislación pionera en el mundo basada en la autopercepción.
Principales Cambios Propuestos para Menores de 18
El proyecto pone el foco en las infancias y adolescencias trans, proponiendo barreras que hoy no existen y que contradicen el espíritu de la ley actual.
Prohibición Quirúrgica
Se prohíben las intervenciones quirúrgicas de reasignación de sexo para menores de 18 años.
Consentimiento Parental
Se exige el consentimiento «expreso y unánime» de ambos progenitores para el cambio registral.
Validación Médica Externa
Se requiere la validación de un equipo de psiquiatra, psicólogo y médico para aprobar el cambio.
El Camino al Reconocimiento: Antes vs. Después
La propuesta de ley busca reemplazar un proceso basado en la autonomía por uno basado en la evaluación y el permiso de terceros, aumentando la burocracia y patologizando la identidad.
El Argumento de la «Neutralidad» vs. la Realidad de los Derechos
La Postura del Proyecto de Ley
Argumentan que el Estado no debe financiar «concepciones culturales» sin «consenso social o científico». Hablan de «neutralidad ideológica» y «no agresión fiscal».
La Respuesta de las Organizaciones
Califican esta «neutralidad» como una «definición ideológica» que niega la diversidad y el derecho a la autopercepción. Advierten que se busca crear impunidad para la violencia y la discriminación.
La Paradoja de la Autonomía a los 16
El proyecto genera una contradicción directa con otros derechos ya adquiridos por los adolescentes en Argentina, como lo señala la diputada Mónica Macha.
Derecho al Voto ✅
A los 16, el Estado reconoce la capacidad de decidir sobre el futuro del país.
Mayoría de Edad
Pleno ejercicio de derechos civiles.
Propuesta de Ley ❌
Niega la autonomía para decidir sobre la propia identidad antes de los 18, un derecho fundamental y personalísimo, contradiciendo la progresividad de derechos.
Flujo del Proceso de Cambio Registral
Esta comparación visualiza cómo el proyecto transformaría un trámite de afirmación de derechos en un laberinto burocrático y médico.
Ley Actual (26.743)
Propuesta de Ley
Desde la perspectiva de los autores del proyecto, se argumenta que la Ley 26.743 «utilizó al Estado» para imponer concepciones culturales y médicas que «no gozan de consenso social ni científico», y que no deberían ser objeto de financiamiento público. Afirman no negar la libertad individual, sino buscar «encuadrarla en un marco que respeta los límites naturales del orden jurídico, la neutralidad ideológica del Estado, y el principio de no agresión fiscal hacia los contribuyentes». Sin embargo, críticos como Macha y Rueda consideran que esta «neutralidad» es, en realidad, una «definición ideológica» que «niega las diferencias y las desigualdades de género» y los derechos de cada persona a autopercibir su identidad.
La comunidad LGBTIQ+ y las organizaciones de derechos humanos alertan que la aprobación de este proyecto pondría en riesgo los derechos humanos de la población trans en Argentina. Alba Rueda, en particular, enfatizó que la propuesta busca «crear la impunidad para la violencia física y simbólica, para la discriminación» y «crear distintos estándares de ciudadanía utilizando la complicidad del fascismo hoy en Argentina».
En síntesis, este proyecto de ley, impulsado por fuerzas políticas con una agenda conservadora, representa un intento de desmantelar los avances logrados en materia de derechos de identidad de género en Argentina. Sus implicancias, de ser aprobado, serían significativas para la autonomía de adolescentes y para el ejercicio pleno de los derechos de la comunidad trans en el país.