El pasado fin de semana, el reconocido bailarín y coreógrafo O’Shae Sibley murió a los 28 años tras haber sido brutalmente apuñalado en una gasolinera de Brooklyn. La policía no ha tardado en asegurar que podría tratarse de un crimen de odio.
Tal y como han asegurado las autoridades, el bailarín fue atacado por varios hombres, que empezaron a increparle vilmente con diversos insultos homófobos. O’Shae Sibley no dudó en responder, por lo que la discusión fue yendo a más.
Hasta tal punto que uno de los que formaban parte de ese grupo apuñaló coreógrafo. Fue entonces cuando Otis Pena, una de las personas de confianza del coreógrafo, trató por todos los medios de detener la hemorragia. Al menos hasta que su amigo fuera trasladado urgentemente al hospital.
A pesar de los esfuerzos, no pudieron hacer nada por salvarle la vida. De esta forma Otis Pena, a través de un vídeo compartido en la red social Facebook, escribió lo siguiente: “Lo asesinaron porque es homosexual, porque defendía a sus amigos”. Por si fuera poco, añadió algo más: “Su nombre era O’Shae y vosotros lo matasteis. Todos vosotros lo asesinasteis delante de mí”.
El pasado lunes, la Policía ha confirmado que, dadas las circunstancias, la Unidad de Delitos de Odio ha comenzado una investigación.
El objetivo es claro: dar con los culpables de este asesinato. La familia de O’Shae Sibley no ha tardado en denunciar públicamente el odio y la discriminación que sigue sufriendo la comunidad LGTBIQ+.
